1. Preparación emocional para el parto
Son cuatro encuentros con la mamá (e idealmente también la pareja), con una frecuencia semanal y de una hora de duración. Si bien se sugiere comenzar a partir de la semana 20 de embarazo, cada familia puede elegir a partir de qué semana de gestación quiere iniciarlo.
Objetivos
– Acompañar y sostener emocionalmente a mujeres/familias que están esperando el nacimiento de un hijo.
– Trabajar sobre las emociones que aparecen generalmente en el embarazo (miedo, ansiedad, angustia, euforia, entre otras) y facilitar recursos concretos para manejarlas.
– Brindar información específica sobre el período de embarazo que están atravesando, permitiendo que las mamás tengan claro qué es lo esperable y qué no en cada etapa de la gestación.
– Fomentar prácticas de cuidado y salud que promuevan gestaciones saludables.
2. Acompañamiento durante el momento del parto
¿En qué consiste?
Es el acompañamiento presencial desde el momento en el que la mamá inicia el trabajo de parto hasta el momento del alumbramiento. También se incluye una visita durante el posparto en el domicilio a acordar con la mamá.
Objetivos
– Brindar apoyo emocional durante todo el trabajo de parto y el momento del alumbramiento.
– Ofrecer seguridad, tranquilidad emocional y aliento durante el paso del embarazo a la exterogestación.
– Informar sobre las diferentes etapas del parto en la medida en la que se van suscitando.
– Facilitar la comunicación familia/equipo sanitario.
– Propiciar el encuentro inmediato mamá-bebé postparto.
3. Acompañamiento durante el puerperio
Son espacios de encuentro a darse durante los primeros meses del posparto. Con una modalidad de cuatro reuniones con la mamá y el bebé de una hora de duración, y una frecuencia a establecer de acuerdo a las necesidades de cada familia (diarias, semanales o quincenales).
Objetivos
– Acompañar los primeros tiempos de posparto brindando estabilidad y orientación en relación a las nuevas organizaciones cotidianas.
– Proporcionar herramientas para poder gestionar los cambios emocionales que surgen con el puerperio.
– Ofrecer habilidades para construir una relación saludable con el bebé.
– Brindar recursos para acompañar los cambios en la pareja a partir del nacimiento de su hijo.
4. Sesiones de consultoría de crianza y asesoramiento a padres
Son espacios de escucha donde, por medio de una consulta de una hora de duración, se abordan las problemáticas planteadas, brindando recursos concretos de afrontamiento y resolución de conflictos.
La cantidad de consultas no se pueden establecer a priori, dado que dependen de los recorridos singulares de cada consultante. Y la modalidad de asesoramiento puede ser: individual, de pareja o familiar.